miércoles, 19 de diciembre de 2012

¿De qué lado estás? Parte I


La nueva vida de laburar y ser músico, que me torna absolutamente bipolar por razones ya expuestas, me está dejando poco tiempo para mis opiniones. Ya saben a quién le hecho la culpa: al laburo por alienante, claro está. Es un call center....qué le voy a hacer. Una salvedad: es para atención al cliente. Aprovecho para contar que ya le saqué la ficha a cada personaje, los cuales merecen una nota. En particular, siempre hay uno que es el súper agresivo, súper irónico, súper telemarketer, que viene de una campaña que vende algo súper basura, y que tiene una actitud frente a la vida súper tóxica...

Sepan entender mi hispanización de la palabra "super" como "súper". Grave que no termina ni en "N", ni en "S", ni en vocal. Indiscutible. No me rompan. Los yankis no son mejores que nosotros. Si no les gusta, ármense un blog y escriban una nota sobre cuán boludos somos los que le ponemos tilde a SÚPER...

Todo para rellenar...

Mi tesis de hoy, lo copio tal cual me salió manifestarlo en el caralibro:

Noto que cada vez con mayor frecuencia alguien Anti-K o Ultra-K mete la política en comentarios cada vez menos relacionados. Uno que sueña con un mundo mejor, y no con la dominación absoluta de un partido, o de un "anti partido", lo ve como una inmadurez. Debo estar equivocado, sea por no estar en ningún bando, o sea por soñar...

Más que un debate político, lo que pongo en relieve es la actitud desubicada de una persona, sea cual fuere su inclinación (mejor dicho, ante quien fuere su inclinación, su genuflexión), al mezclar la política con cada vez más tópicos. Hay oportunidades que permiten hacerlo por vías del ingenio, y siempre son bienvenidas para mí las críticas al poder. Lo feo es estar hablando de cosas bonitas o de cosas que nos gustan y que me vengan a romper las pelotas con cuestiones del poder.

Puntualmente, hablaba de regalos de navidad y de música con una amiga, y un tilingo empieza a insultar a Cristina. No sé qué habrá dicho por cadena nacional esta vez, pero esta persona decía que para ella no existe Papa Noel. Asumo que se refería a la tendencia del gobierno nacional a combatir las corporaciones, que son las que crean el frenesí de consumo navideño (por eso con las mineras y fumigadoras no se mete, claro). Estuve averiguando, porque dado que a mí me interesan las noticias que marquen el devenir del país, no tenía idea. No son lo mío las declaraciones estrafalarias...Resulta que criticó la figura de Papá Noel, alegando que es "transplantado de otra cultura". ¿Acaso no lo es? Eso sí, ya lo sabíamos, no lo descubrió Cristina, entonces, ¿Van a ser tan obtusos de negarlo? Si sos Ultra K, sabelo, y si sos Anti K, y querés seguir mamanto un mito corporativo, allá vos. La verdad que los tipitos de Coca Cola en las peatonales tocando las canciones navideñas, más allá de la propuesta musical en sí, me dan ganas de disparar...muchas ganas...

Esté de acuerdo con aquella persona o no, eso poco importa. Obviamente que me va a molestar si encima representa una burla a mis valores, pero aún si representa una crítica a quien me opongo resulta molesto, más molesto, puesto que no vale la pena manchar lo lindo de una charla entre iguales con la mera mención de alguien indeseable. Para qué conversamos y nos distraemos, si alguien falto de paz, acobardado por los medios de falacias y dicotomías, viene a molestar.

Y pienso que cada vez es ser peor. Pienso que hoy en día: un ciclista no va a poder practicar su deporte sin que escuche nombrar al jefe de gobierno porteño; un analista de sistemas no va a poder tocar una netbook sin que le rompan las pelotas con el plan Conectar Igualdad; con el aumento que están anunciando ahora, uno no se va a podir subir a un bondi ni esperar en la parada, y va a fumarse la hora de viaje o de regreso hablando de eso. Encima, cada vez son más "creativos". Se suman a la neurosis de la vida de ciudad la desinformación, y salen cosas en verdad curiosas. Va a llegar el día que uno esté hablando del clima, que es la primer estupidez que te vienen a hablar para romper el hielo, y alguna histérica va a decir: "Sí, porque gracias a esta yegua, llueve cada vez más, mientras usa la plata de los jubilados para regalarle paraguas a los villeros". Esa tortura cotidiana muchas veces está impulsada por la noticia tergiversada que esté de moda repetir como loro en la semana o mes. Sí, encima eso, hablar al pedo...

Odio los mensajes anti politizantes, porque son una manera de poner un telón a los problemas sociales. No se confundan. Esto es más bien un poner las cosas en su lugar. Así como dicen que no hay que poner los huevos en una misma canasta, yo agregaría: poner los huevos donde corresponde. Nadie expone ni denuncia en los espacios correspondientes. Todos esos cómicos, cuando se debate y hay que poner las cartas sobre la mesa, se nota que no son más que payasos, o simples marionetas.

Por último, cabe destacar un síntoma interesante a nivel político también. La gente vive hablando de política, discutiendo de política, peleándose por política. Está tan neurótica por su situación y está sumida en un remolino de bronca, y desde la cúpula se estimula y se hace uso y abuso de éste. El poder tiene una mecánica de separar a la gente para utilizarla como peones en sus intereses, y este es un claro ejemplo. Cada vez más gente se putea por criticar/defender "a Cristina" (sí, encima de eso, la lógica personalista), y se aleja de la búsqueda de un país ideal, que sería un debate más interesante. Pero cómo va a lograrse en medio de esta guerra de bandos ficticia. Esto no es la "lucha de clases", que es parte de la teoría marxista que avalo y adopto, pues estos debates tienen poco que ver con ello. Si fuera así, la clase oprimida tomaría conciencia de quiénes pudren la cuestión y ofrecerían una resistencia con un plan de acción. Justamente, esto es un proceso por el cual esa conciencia para sí se ve nublada por la desinformación y la ignorancia. Poco que ver con la lucha es que la gente se escupa y se insulte por ponerse una camiseta de un partido político.

 Un serio debate sobre la bipolaridad de la política se desprende de ello, pero lo quiero dejar aparte, de allí que exista una primera parte y una segunda.

Hasta acá por hoy.


4 comentarios:

  1. Yo viví los 90 (y los 80 y recuerdo una parte de los 70) y no sabés cuan preferible es la súper (con tilde) politización al "mechupaunhuevismo" pragmático de esa época. Sin debate ideológico, sin cuestionamientos, todos haciendo negocios espurios, contentos de viajar al exterior o comprando desde acá baratijas por 2 pesos. Ya se que molesta, pero en el fondo es preferible.

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    1. Debate ideológico sí; hacer observaciones y relacionar cosas inconexas sin argumentos y en situaciones que tienen poco que ver , no. De eso se trata la nota...

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    2. Penúltimo párrafo, el que empieza con "odio".

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  2. Por dar un ejemplo..mejor es discutir que se hace para limpiar mejor el barrio y educar para èso... a que cada vecino viva sòlo puertas adentro en su Propiedad horizontal, casona, chalet, vivienda humilde, casa de country etc. En Argentina todo lo que ocurre es una gran oportunidad, quizàs al no ver la realidad de otras naciones y tener el ideal inconciente de paz absoluta, muchas veces no vemos còmo realmente se construyen las cosas ENTRE TODOS, porque.. èso jamàs ha sucedido en Argentina.
    La pasiòn por la verdadera transformaciòn incluye el todo, es còmo el arte dònde la màs grande cantidad de informaciòn, experiencia y nuevas ideas...cuando chocan en momentos de apertura mental surge un bing bang de revelaciones..y el resultado es la creatividad que trae luz.

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